Henry Miller, fue un escritor norteamericano, nacido en Nueva York en 1891 y fallecido en Los Ángeles en 1980. A lo largo de su carrera publicó una serie de novelas semiautobiográficas en las que trató de denunciar la hipocresía moral de la sociedad estadounidense puritana en la que se desenvolvió. A través de su narrativa logró escandalizar el seno de los Estados Unidos y varias de sus obras fueron censuradas y catalogadas de pornográficas; de hecho en 1934, año en el que publicó Trópico de cáncer, tuvo que enfrentar un proceso legal por obscenidad.
Debido a esta situación, tuvo que arreglárselas para dar a conocer sus trabajos, los cuales eran vendidos y distribuidos de manera clandestina, lo que acrecentó su reputación de escritor underground.
Para 1964, la Corte Suprema de los EE. UU., anula el juicio contra Miller por obscenidad y con ello se inicia lo que posteriormente se conocería como revolución sexual.
Entre sus obras destacan: Trópico de Cáncer, Trópico de Capricornio, Primavera negra, Sexus, Plexus, Nexus, El mundo del sexo, entre otras; las cuales fueron de gran influencia para los escritores de la Generación Beat.
En cuanto a su influencia dentro de la música, en 2012, la banda italiana Drink to me, lanzó al mercado su álbum S, el primer tema de dicho material discográfico lleva por título precisamente Henry Miller; también encontramos a la banda Tropic of Cancer, este proyecto en solitario de Camella Lobo, al contrario del libro de Miller, nos lleva a recorrer atmósferas lánguidas y etéreas, aunque ambas desprenden una sensación de desasosiego similar; además tenemos al poeta, flamencólogo y crítico español Félix Grande Lara con su disco Santuarios un homenaje a Henry Miller y, finalmente, a las bandas The Henry Millers , compuesta por John MacCallum y Katie Schecter, originarios de Nueva York; y los mexicanos Henry Miller, híbrido en el que participan un par de psicólogos, un maestro de primaria y un diseñador, para darle vida a lo que ellos mismos han denominado como funk metal científico.
Ahora bien, ya señalamos que las obras de Miller, fueron de gran influencia para la Beat Generation, pero, ¿a qué nos referimos con ésta? La Generación Beat, se refiere a todo un movimiento cultural, encabezado por un grupo de escritores estadounidenses de la década de los cincuenta, así como al fenómeno sobre el cual escribieron.
Algunos elementos definitorios de la Generación Beat son el rechazo a los valores estadounidenses clásicos, el uso de drogas, una gran libertad sexual y el estudio de la filosofía oriental. Esta nueva forma de ver las cosas dejó su principal influencia y legado en lo que posteriormente sería conocido como contracultura. Los principales representantes de la Generación Beat, son Allen Ginsberg y su poema Aullido; William Burroughs y su novela El almuerzo desnudo; y Jack Kerouac y su texto En el Camino.
En el camino, o en su idioma original On the road, está considerada como la obra definitiva de la Generación beat, y recibe su inspiración del jazz, la poesía, y las drogas; describiendo un modo bohemio y romántico de vida. En el camino es una novela en parte autobiográfica escrita como un monólogo interior y está basada en los viajes que Kerouac y sus amigos hicieron por los Estados Unidos y México entre 1947 y 1950 y contribuyó a la mitificación de la Ruta 66. Además On the road, es el nombre de una canción compuesta por el mismo Kerouac, y que se hizo famosa en la voz de Tom Waits.
Thomas Alan Waits más conocido como Tom Waits, es un músico, cantante, compositor y actor estadounidense, famoso por sus canciones de tono áspero, inspiradas en escritores como Charles Bukowski.
Waits, es además uno de los tantos músicos que fueron influenciados por la Generación Beat, entre los que destacan Janis Joplin, quien en su álbum Pearl, editó el tema Mercedes Benz, texto del poeta beat Michael McClure; con el que hace una crítica a la sociedad de consumo; Bob Dylan, y su tema Vomit Express, poema original de Allen Ginsberg, con quien Dylan compartió el micrófono para la grabación de ese corte; y la cantante Patti Smith, quien en su trabajo Peace and Noise, nos regala la canción Spell, original del mismo Ginsberg.
Otros músicos no sólo fueron influenciados por la Generación Beat, sino que además se les considera parte de la misma; tal es el caso de James Douglas Morrison, mejor conocido como Jim Morrison; vocalista y líder de la mítica banda de rock The Doors.
Por su aportación poética a las letras americanas, eclipsada por su figura de estrella musical, Jim Morrison fue uno de los precursores de un tipo de literatura que, como el país, estaba todavía despertando. Morrison comenzó a jugar con la poesía y la prosa desde muy temprano, quizá por la necesidad de contar lo que sucedía a su alrededor. Cursó estudios de cine en la UCLA, y aunque no llegó a materializarlos nunca en forma de película, él mismo confesó, años después, que mucho de lo escrito durante su vida no había sido más que una especie de tratado de estética de su visión cinematográfica.
Su actitud hacia la modernidad fue de desdén. Personificó la figura literaria del viajero errante o “wanted”, que él mismo usaba en sus poemas. La realidad perdida que buscaba en la ciudad, esa metrópolis definida en términos modernistas y simbolistas, era en el fondo una reflexión de la sociedad. Todas las fuentes artísticas de las que bebió las aplicaba en cada uno de sus conciertos. De esta forma cada uno de sus shows era una experiencia única e inaudita en la historia de la música, y los fans enloquecían por verle. Cada canción era un ritual y a menudo combinaba sus hits con introducciones en prosa que hacían del lenguaje de Morrison un sello de identidad de los Doors. Morrison nos dejó ideas sobre la poesía que nos indican que su dedicación y entrega fue mucho más que un viaje a su propio mundo. Fue una inmersión espaciotemporal en la nación que acunaba el cambio.
El poema es el registro de un movimiento de la percepción de la visión. La forma poética es el patrón de ese movimiento a través del espacio y del tiempo. La imagen de fondo es el contenido de la visión emergente en el poema. El vehículo de movimiento es la imaginación. La condición de movimiento es la libertad.
Morrison quiso ser poeta francés (y por ello quizá les resulte familiar el lenguaje que utiliza) pero estaba demasiado perdido en el desierto de Arizona, o medio drogado en algún backstage. No fue un advenedizo más del simbolismo —aunque sí le inspiró en sus orígenes—. Llevaba en sus venas el sello de “maldito” y emanaba bohemia allá donde tocaba, y aquellas dos características, unidas a su estilo a la hora de escribir, le hicieron sin saberlo el más rockero de los poetas de la generación Beat. La idea de que la percepción puede ser modificada y ampliada concienzudamente fue un principio fundamental de la Generación Beat.
La idea del poeta-vidente. Y así fue la poesía que sin querer marcó un período fundamental de la historia de Estados Unidos: concisa, profunda en términos de claridad de expresión y de tono; plagada de imágenes en versos simples, emocionales; una poesía pesimista y melancólica, resignada a la realidad que le tocaba ilustrar.
Como prueba de lo que el Rey Lagarto aportó a la Generación Beat tenemos los temas Crystal Ship, Under waterfall y Is everybody in?, este último de la autoría de Morrison, recitado por William Burroughs.
Ahora bien, la relación del beat con la música viene desde sus mismos orígenes terminológicos, pues -a pesar de las significaciones que le diera Kerouac y otros miembros de la generación- el término beat procede del argot que utilizaban los músicos del jazz de la época.
La palabra beat, en su doble acepción, era parte de la jerga del jazz desde la segunda guerra mundial. La primera idea y la más evidente está referida al pulso del metrónomo que sigue marcando el ritmo aunque los músicos dejen de tocar, extrapolándose la idea a los latidos del corazón acelerado por la benzedrina que sigue marcando el pulso aunque la energía del cuerpo se acabe. La segunda noción apunta a las ideas de poor and exhausted que igualmente se asocian a la resaca de la droga. Cuando Kerouac comienza a usar la palabra beat junto a John Clellon Holmes para identificar al pequeño grupo de amigos que conformarían originalmente la generación beat (Ginsberg, Cassady, Burroughs, él mismo, y más tarde Corso, Ferlinguetti y Orlovski), posiblemente está pensando en ello sin dotar de mayor profundidad al término.
El entusiasmo que la palabra suscitaría en ellos se debe, según cree John Arthur Maynard (escritor y especialista en la Generación Beat), en la asociación entre el artista del jazz y el mito del artista solitario y torturado que encarnaba Rimbaud. No fue la última vez y posiblemente no fue la primera en que se rindió culto a quienes habían muerto entregados a su arte y por su propia mano (o debido a una sobredosis de alguna sustancia).
A la vez que el movimiento Beat iba tomando forma, el Bebop también iba adquiriendo importancia, especialmente en Nueva York, cuya Calle 52 hervía con la actividad de los clubes de jazz que practicaban este estilo. El Bebop, era un estilo de jazz innovador, que nace en los años cuarenta, caracterizado por los pequeños combos en oposición a las grandes orquestas de jazz y por grandes alardes de virtuosismo.
El auge del Bebop se sitúa en el corazón de Nueva York, con músicos de la talla de Dizzy Gillespie, Thelonious Monk, Charlie Parker, Max Roach y Miles Davis, que marcaron una nueva era en la música jazz. Kerouac, Ginsberg y sus compañeros pasaban mucho tiempo en esos clubes de Nueva York, como el Red Drum, Minton’s, The open door y otros garitos similares, matando el tiempo y asumiendo los contenidos de su música. Parker, Gillespie y Davis no tardaron en convertirse en los “Héroes Secretos”, en palabras de Ginsberg, de este grupo de estetas.
Como lo podemos constatar en los trabajos de Gregory Corso: Requiem for ‘Bird’ Parker, Musician, que fue publicado originalmente en el poemario de 1955 The Vestal Lady on Brattle; además dentro de su poemario Gasoline, se encuentra el texto For Miles, dedicado al jazzista Miles Davis y, finalmente This was my meal, dedicado a Thelonious Monk.
Además se suma el tema The Hunt, de los jazzistas Dexter Gordon y Wendell Gray, obra en la que está inspirada On the road de Kerouac y que también sirvió de inspiración a John Vlellon Holmes para escribir un poemario completo en el que eleva al jazz a la divinidad al entenderlo como un sacramento lleno de profecía y misterio, así como el escenario en el que se llevan a cabo las presentaciones lo traduce como un altar.
La Generación Beat, es sin duda uno de los movimientos culturales (contraculturales) más importantes de la literatura y así como en su momento se vio influenciada por el jazz y marcada por el rock, con el paso del tiempo este grupo de escritores han dejado su huella en diversos ámbitos musicales, como:
1989, la agrupación Material, lanza Seven souls, un disco en el que Bill Laswell, líder de la banda, fusiona su música con diversos poemas de Burroughs: Seven souls, Ineffect, Soul killer, The western lands, The end of words. Esta banda editó en 1994 su disco Hallucination engine, en el que podemos encontrar la voz de Burroughs dentro del tema Words of advice, tema que apareció posteriormente en el disco Spare ass Annie and other tales (The operator’s manual), producido en Nueva York por Neer Perfect Productions, y en el que Laswell tuvo participación.
1992, Ministry, banda de industrial metal, lanza Psalm 69: The Way to Succeed and the Way to Suck Eggs, en el que encontramos Just one fix, en el video de este tema, se aprecia a Burroughs recitando algunas partes de sus poemas.
1996, el sello discográfico Dutch East India Trading lanza una compilación de temas de diversos artistas llamada 10% file under Burruoghs, entre los temas que destacan de este material tenemos: William Burroughs don’t play guitar, de la agrupación Islamic Diggers; His name is William Burroughs, interpretada por Your Nemesis; I Travelled Mostly On The Road, de Herbert Huncke & Chuck Prophet.
2014, Dub Spencer & Trance Hill, lanzaron un material discográfico muy ambicioso, en el que combinan la poesía y la voz de William S. Burroughs, con la música dub. Este disco lleva por título William S. Burroghs In Dub.
Por otro lado, tenemos que en octubre de 1995, Allen Ginsberg visitó la casa de Paul McCartney en Inglaterra, durante su estancia, el poeta recitó para la familia del exbeatle Ballad of the skeletons, la cual le gustó tanto a Sir Paul que decidió hacer una grabación de este poema junto a Ginsberg.
Finalmente encontramos los temas Little Lou, ugly Jack, prophet John, de los escoceses Belle & Sebastian acompañados por Norah Jones, con el que rinden tributo al autor de En el camino; y Pretty girls make graves, de la banda The Smiths, cuyo título alude a una frase de la novela The Dharma Bums, del mismo Kerouac,
Kerouac, En el camino:
“la única gente que me interesa es la que está loca, la gente que está loca por vivir, loca por hablar, loca por salvarse, con ganas de todo al mismo tiempo, la gente que nunca bosteza ni habla de lugares comunes, sino que arde, arde como fabulosos cohetes amarillos explotando igual que arañas entre las estrellas.”
Burroughs, El almuerzo desnudo:
“Las mujeres no son seres humanos, Bill. O quizá más concretamente, pertenecen a una especie diferente a la del hombre… con diferentes deseos y diferentes propósitos en la Tierra”.
Ginsberg, Aullido:
“He visto las mejores mentes de mi generación destruidas por la locura, histéricos famélicos muertos de hambre arrastrándose por las calles, negros al amanecer buscando una dosis furiosa, cabezas de ángel abrasadas por la antigua conexión celestial al dínamo estrellado de la maquinaria de la noche, quienes pobres y andrajosos y con ojos cavernosos y altos se levantaron fumando en la oscuridad sobrenatural de los departamentos con agua fría flotando a través de las alturas de las ciudades contemplando el jazz…
…y surgieron reencarnados en los trajes fantasmales del jazz en la sombra del corno dorado de la banda y exhalar el sufrimiento de la mente desnuda de América para amar en un eli eli lamma lamma sabacthani saxofón que llora estremeciendo las ciudades bajo la última radio con el corazón absoluto del poema de la vida descarnada de sus propios cuerpos buenos para comer mil años. “